Días del ayer

Vivamos un día del ayer
y salgamos al parque agarrados de las manos,
olvidemos nuestros problemas,
y recordemos nuestros sueños,
dejemos que nuestros labios
se encuentren frente a frente,
dejemos que nuestros cuerpos
descubran nuevamente nuestros deseos.

Olvidemos que no somos nada,
recordemos lo que alguna vez fuimos,
que el mundo no nos afecte por unos minutos
y seamos los que paraban juntos.

Olvidemos a las terceras personas
y seamos uno solo junto a la chimenea,
que alumbre nuestros cuerpos
y despierte nuestro deseos,
que nuestras almas se encuentren
y reconozcamos nuestros lamentos.

Vivamos un día del ayer
y seamos uno otra vez
y si lo queremos volvamos a nacer
y volvamos a enamorarnos como la primera vez
o simplemente vivamos un día del ayer
y al día siguiente olvidémonos de nuestro querer.